Se supone queel vehículo pertenece a la municipalidad del Quebrachal, pero según los vecinos es prácticamente imposible despegar al intendente del cómodo asiento del vehículo.  
Es tanto el amor del Roly con la "chata" que según fuentes Off the record,ni la guarda en el municipioy vaya uno a saber donde pasa las noches la queridísima camioneta municipal.  
FUENTE : QUE PASA SALTA