En Rosario de la Frontera, Ricardo Albornoz, un trabajador con una larga trayectoria en Correo Argentino, falleció tras recibir un telegrama de despido. Albornoz, que contaba con muchos años de servicio en la empresa, sufrió un paro cardíaco poco después de leer la notificación de despido.
La trágica noticia generó dolor en la comunidad local, especialmente entre sus compañeros de trabajo y amigos. Albornoz, conocido por su dedicación y compromiso, era una figura respetada y querida en su entorno laboral y personal.
Aunque las causas exactas de su fallecimiento aún no fueron confirmadas oficialmente, se presume que el estrés y la angustia provocados por la noticia del despido podrían haber sido un factor desencadenante, resaltando la vulnerabilidad de muchos empleados que enfrentan la constante amenaza de perder su trabajo y, con ello, la estabilidad económica indispensable para sus familias.
Esta tragedia se suma a una serie de despidos que se registran en el país, evidenciando una situación laboral cada vez más insegura y precaria. Asimismo, destaca las consecuencias humanas de la crisis económica y la ausencia de políticas efectivas para proteger a los trabajadores.